Este libro nos presenta los testimonios de diez madres chinas que, por diversos motivos, se vieron obligadas a abandonar a sus hijas. Desde Kumei, la pobre pinche de cocina hasta las anónimas "María Verde" y "María Roja", todas ellas comparten el dolor de haber tenido que perder lo que más querían en el mundo. La política del "hijo único" en China ha dado lugar al abandono e incluso asesinato de cientos de miles de niñas, ya que las familias rurales prefieren tener hijos. El motivo de esto es en unos casos religioso (se considera que son los hombres los que deben cuidar el altar de los antepasados) y en otros económico (las familias no reciben tierra extra por las hijas, pero sí por los hijos). En este libro se puede conocer de primera mano la historia de diez personas que se vieron obligadas a capitular ante un cruel sistema social que las separó de sus hijas.
En China la llamada "política del hijo único" es el mecanismo utilizado por el gobierno chino para intentar controlar la natalidad en un país de más de 1.200 millones de habitantes. Esta politica se basa en favorecer mucho a las personas que tienen un solo hijo, por ejemplo proporcionándole educación gratuita y cobertura sanitaria y perjudicar a las familias con más de un hijo, obligándoles a pagar multas, a pagar la escuela o a los médicos que atiendan a los pequeños. Esta política surgió en torno a los años 70 y debido a ella, y a la preferencia en muchas regiones por los varones han dado lugar a una enorme cantidad de huérfanas que en muchos casos han sido adoptadas por familias extranjeras. Dado que en muchos casos nadie se preocupaba por estos orfanatos, las condiciones de los mismos eran penosas y dejaron a las huérfanas en una situación de abandono absoluto. Estos lugares fueron reflejados en el famoso documental "Las habitaciones de la muerte" que escandalizó a la mayor parte del mundo occidental y, por supuesto, a gran parte del gobierno chino.
Xuē Xīnrán es una periodista china afincada en Gran Bretaña que ha escrito otros libros famosos con "Generación Mao" o "Nacer mujer en China". Empezó a trabajar en la cadena nacional de radio china donde su programa recibía cartas de madres que se habían visto obligadas a deshacerse de sus hijas e interesada por tales hechos empezó a investigar la situación social en China. Preocupada por el desarraigo que las niñas chinas sufrirían creó la ONG Mother´s Bridge of Love, para crear lazos que unieran a las madres chinas y del resto del mundo. En la actualidad, aparte de escribir, aparece en programas de televisión como experta en la sociedad china.
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